apoltrónate

éste es un blog de buena fe: no busco ningún fin trascendental, sino algo privado y familiar. tampoco me propongo prestar ningún servicio ni trabajo para mi gloria: mis fuerzas no realizarían tal deseo. lo dedico a mi gente (en la sangre y en el afecto) para que pueda encontrar aquí rasgos de mi condición y humor. quiero mostrarme en mi manera de ser, porque soy yo mismo a quien pinto. mis defectos, mis imperfecciones y mi manera de ser se reflejarán aquí de la cabeza a los pies, del cerebro al corazón. si resultara válido, me habría pintado de cuerpo entero y completamente desnudo, pero para eso hay otros lugares. sépase que soy el contenido de mi blog, sin que esto sea válida razón para que emplees tu vagar en un asunto tan frívolo y tan baladí.

lunes, 10 de septiembre de 2012

historias tontas ix

En las noches del tiempo que duró tu ausencia, con curiosidad y lentitud miraba el cielo... Cuántas cosas no vi, además, claro está, de cientos de aerolitos, estrellas y planetas que, desde aquí y desde mí, parecían parpadeantes sílabas de luz, a quienes les conté todo lo que por ti sentía, y quienes me dijeron que tú también me correspondías. Nos hicimos así de sistemas y galaxias, de versos y poemas que poco a poco intercambiamos...
Hoy que has vuelto, tengo para ti un frasco lleno de palpitantes estrellas que espero dejar caer, noche tras noche y una a una, entre tus tibios y húmedos labios, puerto seguro para una voz sin rumbo ni camino: la mía.